“Hay que tenerle amor al instrumento”

Entrevista con Daniel Vedia

El bandoneonista jujeño Daniel Vedia es hoy uno de los referentes de este instrumento en su utilización para la música folklórica. Maestro de varias generaciones de instrumentistas hoy recorre las latitudes divulgando su quehacer artístico, y el de toda una provincia que se convierte en nación cuando de música se trata.

> por Federico "Poni" Rossi

FR: -¿Cuál es la importancia del bandoneón en nuestra música popular?

DV: -El bandoneón estaba en camino de extinción. Yo lo estoy viviendo mucho eso en Jujuy porque el bandoneón en su momento fue rey en los carnavales. En todos los eventos folklóricos de Quebrada y Puna, así mismo en San Salvador, y ahora, aparte de que el bandoneón está desapareciendo, empecé como un proyecto para que el bandoneón se lo incluya en la currícula del Conservatorio Provincial de Música. Es lo principal, o sea, aprender toda la parte técnica, pero también con lectura musical, porque es un instrumento tan rico. Por eso te digo, yo trato de que.

Tal es así que al bandoneón se lo encuadraba mucho con el tango, mas fuera del país, porque tuve la suerte de que una vez nos convocaran para ir a Francia, con Mónica Pantoja y Tomás Lipán, cuando un señor francés, un empresario, nos lleva a un festival de folklore internacional y cultural pero a nivel mundial. Tenías folklore mongol, folklore chino, folklore japonés, ¡increíble!, y estar ahí participando con el bandoneón, y hacerlo cantar al bandoneón, para mí fue también una sorpresa, porque este señor francés, este empresario, nos ve en “Carnaval de Flores”, en Uquía, allá en medio de, nosotros le llamamos los Lechugueros, la comparsa los “Corazón de Pulla Pulla”, de ahí de Uquía. Estábamos haciendo los carnavales de flores, porque después del “Carnaval Grande” y el “Carnaval Chico” viene el “Carnaval de Flores”, el “Carnaval Carpero” y “Carnaval del Remache”. Luego ya viene Semana Santa. Después tenemos el festival de la Humita, del Tamal, del Quesillo, etc., etc.

FR: -El bandoneón es como una extensión de uno mismo ¿no?, porque decías “lo hacía cantar”, “tuve la suerte de hacerlo cantar en Francia”.

DV: -Claro, y bueno, por eso te reitero que en cierta forma, con el correr de los años, algunos están abriendo los ojos de que el bandoneón es un instrumento tan completo. Es tan rico, con sus tonos, sus semitonos, se puede tocar cualquier tipo de música. Yo pienso que el inventor, que fue un alemán, (Heinrich) Band, ni se debe imaginar toda variedad de recursos que se puede tener con el bandoneón, recursos musicales, y lo demuestra Dino Saluzzi haciendo jazz, haciendo todo tipo de música también. 

FR: -¿Y la historia tiene que ver con la iglesia, con las carretas, con el órgano, el instrumento…? 

DV: -En las misas rurales, allá en Alemania, llevar ese órgano tan pesado, tan grande, ese con los tubos… Creo que, yo lo conozco como órgano, capaz que tiene otra denominación para la música religiosa, entonces como era muy trabajoso, y costoso, entonces idearon este órgano portátil y tan chico como es el bandoneón. Porque tiene un sistema de peine, de entradas y salidas de aire a través de un fuelle, que tiene unos bajos hermosos, unos bajos bien graves que tranquilamente combinando las dos manos podemos tocar música religiosa tranquilamente, ¡todo tipo de música!, porque es muy rico, porque abriendo y cerrando una tecla tiene dos notas, tiene dos sonidos distintos, a diferencia del acordeón. Entonces en el bandoneón vos podés abrir una tecla abriendo es una nota y cerrando es otra. Por ejemplo un MI cerrando es un FA sostenido, y así. Por eso tenemos cuatro digitaciones. 

Y bueno, hay que tenerle amor al instrumento, como a cualquier instrumento, como a un piano. Lo importante es que hay que agarrarlo con cariño. Ya lo dice la palabra: “Instrumento”. Y nos valemos de con su sonido de hablar con los sonidos. Y poder expresar nuestro sentimiento a través de su sonido. Es un poquito difícil, pero cuando realmente se toca de corazón, se llega al corazón del que está oyendo.